El resurgimiento de los tradicionales mercados de abastos en muchas ciudades, trae consigo el resurgimiento de determinadas actividades que van más allá de comprar simplemente comida. Se trata de una idea revolucionaria, porque en muchos lugares vemos como las actividades culinarias se ligan a otras actividades relacionadas. Podríamos decir que los mercados de abastos se convierten en pequeños centros culturales y de reunión para los habitantes de muchas ciudades.
Razones para ir más al mercado de abastos
- Para comprar, este motivo no podría faltar como el primero de las razones por las que ir al mercado de abastos. Los productos de los mercados, suelen ser productos tradicionales y mucho más frescos que los de otros lugares de compra.
- Tomarnos un aperitivo, del puesto a nuestra mesa. Muchos mercados de abastos se han modernizado y han pasado de ser simplemente lugares para vender comida a lugares donde se cuida la hostelería, porque, a fin de cuentas, los buenos productos proceden de esos puestos donde sus dependientes se han preocupado ellos mismos de ir a comprarlos esa misma madrugada, sea fruta, pescado o carne.
- Degustaciones, talleres y exposiciones. Debido a que se trata de lugares tradicionales de reunión de las personas de una ciudad, los mercados se pueden convertir en espacios donde ofrecer por supuesto degustaciones, pero también donde organizar talleres culinarios como catas o pequeños cursos de cocina, e incluso exposiciones, donde podría resultar oportuno mostrar fotos de antaño.
Cero que pocas razones nos faltan para decidirnos a visitar este mismo fin de semana el mercado de nuestra ciudad, para recordar viejos tiempos, pero también para deleitarnos de la transformación que muchos de estos mercados han sufrido. Sea en la capital o sea en un pueblo podrás sorprenderte.